Edelmiro Molinari en Córdoba

El ex Color Humano al lado de sus guitarras




Por Gastón Martínez para
El mundo entre las manos virtual


Envuelto en un hermetismo natural que mira con cierta nostalgia a la generación del “Flowers Power ”, Edelmiro Molinari, ya distendido en su camarín, con un trago entre las manos, me concedió una nota muy sincera en la que disparó su honestidad y racionalidad, descomprimiendo con absoluta franqueza temas tabúes como: el dinero, la religión, y la política.

Actualmente solo con su guitarra, analizando las posibles ventajas y desventajas de éste formato, Edelmiro se despacha diciendo que cuando se toca en diferentes formatos como el de trío por ejemplo, se tienen que seguir ciertas estructuras; en cambio cuando se toca solo, se experimenta la máxima libertad, "es como el amor, al cual es tan difícil llegar, ya que tenemos que despojarnos de toda la caca que tenemos en nuestras cabezas".
Como tantas otras personas que vivieron la exquisita utopía del "paz y amor" y el comienzo de los mega festivales, cuando el guitarrista repasa el pasado recuerda: "nosotros venimos de la época de Woodstock, que fue un momento muy especial no solo en Estados Unidos, si no en el mundo; no había Internet, y los medios de comunicación no tenían el desplazamiento que tienen hoy en día, pero te aseguro que esa onda estaba en todos los países del continente, y éste movimiento albergaba la lucha por la paz y el amor. Esto parece muy hippie -aclaró- pero si lo tomas desde un plano más religioso es la única respuesta" .
“Yo me fui cuando tenia 24 años, volví muchas veces. En una de esas vueltas hicimos la despedida de Almendra entre el 79-80 con un show muy emotivo acá en La Falda, fue un momento muy difícil ya que estábamos mal como grupo, nuestros egos tiraban para diferentes lados y pienso que realmente los humanos hicimos todo como el culo siempre”, disparó el líder intelectual de Color Humano cuando se le preguntó cómo fue esa mítica despedida de Almendra, así como también por qué terminaron como terminaron.
Muchos son los fenómenos que en la vida de una persona tienden a desunir en vez de unir y Edelmiro analiza el Por qué de estas cuestiones: "yo nací católico, pero creo en todas las religiones porque el error que tenemos es la desunión, y si vos te fijas las desuniones se remontan hasta hace casi 2000 años. Esto se ve muy cotidianamente en la política, basta ver lo que pasa cuado tenemos elecciones donde terminamos todos peleados. Esto viene de afuera y está totalmente emparentado con la guita, yo odio la mentira, la traición por el billete, porque desgraciadamente compra a la gran mayoría de la gente, porque nunca se sabe cual es el límite, y en algún momento te terminas vendiendo. Y los que controlan esto lo saben, por eso manipulan las cosas por medio de ciertos elementos".
Para finalizar Molinari hurgó en su costado existencialista y comentó que si se piensa el mundo sin la raza humana, estaría lleno de verde, nada estaría contaminado y seria realmente un paraíso…

Foto: Gastón Martínez.